Decenas de piezas que van desde zapatos miniatura hasta llaveros, el “maestro Manuel”, como es conocido comúnmente, adorna su lugar de trabajo en el que ha permanecido poco más de treinta años elaborando y reparando calzado de toda la familia.

 

El pequeño local ubicado sobre la calle Nigromante, a unos metros del cruce con 5 de Febrero, en la colonia Centro de Toluca, llama la atención de chicos y grandes debido a las numerosas piezas que tiene colgadas, y que han sido tanto obsequios de familia, como de sus mismos clientes.

 

“Me los han ido regalando con el paso del tiempo. Todo comenzó desde un recuerdito que me dieron y que se me ocurrió colgar, eso ya hace muchos años. Desde entonces siempre que me regalan algún souvenir o un recuerdo, lo cuelgo aquí”.

Zapatos miniatura, dardos, peluches, juguetes y llaveros, entre otros, son los artículos que se pueden apreciar en el negocio que día a día recibe clientes que admiran la inusual decoración desde el primer momento en que llegan al lugar.

 

Desde los seis años, el maestro Víctor ha estado involucrado en la industria de la reparación del calzado de chicos y grandes, pero no fue sino hasta sus doce años que ya podía fabricar un par de zapatos por su cuenta.

 

“Mi familia estuvo en esto y desde chiquito yo me involucré. A mis seis años ya les ayudaba con los trabajos que había pendientes, pero fue hasta que tenía doce años que yo ya podía hacer unos zapatos prácticamente sin ayuda de nadie”, manifestó Víctor Manuel León.

 

Incluso zapatos miniatura y con diseños únicos han sido fabricados en este lugar, mismo que  fue establecido en el sitio desde el 17 de Septiembre de 1985 y que a casi treinta años, es un lugar característico debido a la perfecta combinación entre lo inusual y lo extraordinario, según vecinos del lugar.