A causa del covid-19, fue intubado el arzobispo emérito de la arquidiócesis primada de México, el cardenal Norberto Rivera Carrera.

De acuerdo con el sacerdote Hugo Valdemar Romero, exvocero del cardenal, el estado de salud de Rivera se complicó y tuvo que salir del Hospital Mocel.

«Se le tuvo que cambiar a otro hospital, del que prefiero omitir su nombre para mantener la privacidad del cardenal», afirmó Valdemar.

«Actualmente ahí permanece en terapia intensiva, sedado e intubado«, agregó sobre el cardenal de 78 años de edad, originario de Durango.

El exvocero explicó que Rivera tiene serios daños pulmonares y la saturación de oxígeno «le llegó a bajar al 40 por ciento«.

El estado del cardenal es tan grave, agregó, que el lunes pasado se le dio la extremaunción; el sacramento para los creyentes enfermos o en inminente peligro de muerte.
La Arquidiócesis lo ha abandonado, asegura Valdemar

Valdemar reiteró que lo anterior ha sucedido «al margen de la Arquidiócesis», encabezada por el arzobispo primado de México, el cardenal Carlos Aguiar Retes.

«No ha querido costearle sus gastos médicos y ni siquiera brindarle apoyo espiritual», denunció.

A pesar de que se le dio la extremaunción, el exvocero dijo que ni a él, ni a los familiares del cardenal se les permite ingresar al hospital para ver al enfermo.

Las declaraciones del exvocero evidencian una rencilla política entre los cercanos a Rivera y la actual autoridad religiosa en México.

Hugo Valdemar dijo que, ni los amigos y familiares ricos de Rivera lo pueden ayudar; «Ellos no están obligados. La que está obligada a pagar es la Arquidiócesis de México, la cual tiene seguro médico para sus sacerdotes», expresó.

Aún a pesar de todo lo anterior, Valdemar aseguró que Rivera Carrera dio este martes muestras de mejoría.