La máxima casa de estudios en el país, la Universidad Nacional Autónoma de México, no sólo es semillero de mexicanos distinguidos, en los últimos días se ha convertido en el campo de batalla que va desde peleas por poder y problemas con el sindicato.

Para muestra, la información que publica el Diario La Razón, donde señala que la UNAM creó un grupo de expertos que definirá si derriban total o parcialmente el nuevo Edificio H de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales; una estructura que ni siquiera se ha estrenado.

Todo esto porque un grupo de artistas plásticos, dramaturgos, intelectuales y escultores, considera que “resta visibilidad” de los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl y rompe con el diseño arquitectónico del Espacio Escultórico de Ciudad Universitaria.

 

El vocero de UNAM, Néstor Martínez -al que por cierto se le ha acusado de corrupto,- dijo que se están valorando las demandas.

Por si no fuera poco, entre jalones y estirones, este viernes se llevará a cabo una manifestación para pedir que hagan la demolición de cuatro pisos del Edificio H, ya que aseguran, atenta contra el espíritu del paisaje del Espacio Escultórico de la UNAM, considerado Patrimonio de la Humanidad.

Así como este, existe un problema con el nuevo director de TV UNAM, Nicolás Alvarado con el que buena parte del sindicato está molesto porque corrió personas de confianza bajo la premisa de que “no encajan en su proyecto”.

Los trabajadores lo tachan de arrogante y aseguran que no conoce la UNAM. Por si fuera poco, comentan que no tiene claro el proyecto para TV UNAM aunque él presume que sí.