La lucha diaria es en contra del cáncer y el sobrevivir en la sala de espera.
Toluca, México.- Desde hace un mes Karla Berenice Morales sale a las calles de Toluca cargada con una pancarta en la que explica el tipo de leucemia que padece su hijo menor. La lucha diaria es en contra del cáncer y el sobrevivir en la sala de espera.
Desde el veinticuatro de noviembre llegamos a Toluca para llevar las quimioterapias de mi hijo pero es duro sobrevivir sin poder trabajar y no despegarte de la sala de espera.Karla.
A su hijo Víctor David, de ocho años de edad, le diagnosticaron leucemia linfoblástica aguda, por lo que para salvarle la vida Karla tuvo que viajar desde León, Guanajuato, al Hospital del Niño de Toluca para iniciar tratamientos para revertir la enfermedad.
El tratamiento va a ser largo, no me han dicho cuánto, y yo debo estar de tiempo completo con mi hijo, dejé de trabajar y me las veo duras para mantener a mis otros dos hijos.
Aunque encontró ayuda con una fundación para pagar el tratamiento de las quimioterapias, Karla asegura que los gastos diarios que obliga el tratamientos son muchos, por lo que se ha visto en la necesidad de salir a pedir ayuda.
A veces nos quedamos en el albergue pero aún así debemos gastar para comer todos los días, mis hijos se quedan en la sala de espera mientras yo salgo a pedir ayuda a los camiones y en las calles.
Víctor David es el menor de sus hijos y debido al tratamiento contra el cáncer ha tenido que ser internado desde el pasado 24 de noviembre en el Hospital del Niño. Los médicos le dan esperanzas de vida, sin embargo actualmente sobrelleva la etapa más crítica, comenta Karla.
Esta es una enfermedad muy dura, la verdad no sé qué haría si no tuviera el apoyo de la fundación.
Para buscar ayuda, Karla sale a diario a las calles en el horario que no se pueden hacer visitas, cargando con su pancarta en la que explica la enfermedad de su hijo.
