El año 2016 fue el más violento en Guerrero, en lo que va de esta administración. Hay evidencias de que la organización criminal “Los Rojos”, a la que se le atribuyen asesinatos, secuestros y estar implicado en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, sigue delinquiendo.
Santiago Mazari Hernández, alias “El Carrete”, “El Señor De Los Caballos” y/o “El Ocho”, presunto líder de “Los Rojos” y uno de los objetivos prioritarios del Gobierno federal, mantiene la producción de drogas y es provocador de la violencia en Guerrero, de acuerdo con información militar.
Guerrero es la entidad más peligrosa del país al acumular 8 mil 380 homicidios, de enero de 2013 a marzo de 2017, revelan las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Los tres primeros años de esta administración, Guerrero fue la entidad más violenta al registrar tasas de 59.22; 42.69 y 56.50 homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes; aunque el año 2016 fue el más violento, con 61.67. Guerrero se ubicó en segundo lugar porque Colima registró 81.55. La tasa nacional fue de 17.03.
La Procuraduría General de la República (PGR) ofrece recompensa de 3 millones de pesos, a cambio de información que lleve a la captura de “El Carrete”, también acusado del homicidio de Gisela Mota Ocampo, el 2 de enero de 2016, cuando era presidenta municipal de Temixco.
En lo que va de esta administración, el Ejército ha asegurado 30 narcolaboratorios en el área donde “Los Rojos” tienen presencia, precisa la información obtenida por EL UNIVERSAL.
La información de inteligencia federal indica que Los Rojos también se dedican al trasiego de goma de opio.
Los elementos del Ejército que se dedican a la destrucción de plantíos de droga, destruyeron la mayoría de los cultivos de amapola en los municipios donde hay presencia de Los Rojos: Ayutla de los Libres, Atlixtac, Heliodoro Castillo, San Miguel Totolapan, Leonardo Bravo y Chilpancingo, indica la información oficial.
El último aseguramiento fue el pasado domingo 23 de abril de 2017, cuando los uniformados, adscritos a la 35/a. Zona Militar, hallaron un narcolaboratorio de drogas sintéticas, en el poblado Balzamar, municipio de Leonardo Bravo.
En el laboratorio clandestino fueron localizados 23 kilos 220 gramos de heroína producida, 9 kilos 648 gramos de goma de opio, 473 litros de hidróxido de amonio, 105 litros de goma de opio en proceso, 9.15 litros de ácido clorhídrico, 1 kilo 600 gramos de polvo blanco sin identificar.
